Viva la Vida_Coldplay
domingo, 14 de diciembre de 2008
lunes, 8 de diciembre de 2008
JSE y la Constitución de 1978
He aquí el documento que JSA-Torremolinos ideó para la celebración del 30 aniversario de la Constitución:
Desde Juventudes Socialistas de Torremolinos, pretendemos hacer ver a los jóvenes en esta fecha tan señalada, el 30 aniversario de la Constitución de 1978, que la Carta Magna es algo nuestro, y no sólo de quienes la firmaron en su momento o de quienes la refrendaron con sus votos.
Sabemos que de entre los jóvenes de hoy en día, son pocos los que se preocupan por conocer la historia de nuestro país, por conocer nuestro pasado, los que se interesan por la política en términos generales o quieren oír hablar de partidos políticos y leyes. Es nuestra función, como miembros de las Juventudes concienciar a la gente, en nuestro ámbito de actuación, de que la política es algo de todos, de que la historia marca nuestro presente, y de que lo que hacemos ahora, determina nuestro futuro.
Los jóvenes no sólo somos el futuro de la sociedad, sino que somos ya el presente de la misma, y por tanto, debemos tomar posiciones en cuanto a la toma de decisiones. Porque cuando en 1978 se votó el referéndum por la Constitución española, quienes votaron a favor decidieron acerca de lo que hoy es el presente de España. Así como cuando hemos votado el estatuto andaluz, o la constitución europea, votábamos por el futuro, futuro que algún día, se convertirá en el presente de otras personas, y de nosotros mismos.
Es por ello, que queremos hacer ver a los más jóvenes de nuestro municipio que deben conocer el pasado, para comprender su presente y decidir sobre su futuro. Bajo el lema Conoce la Historia, entiende el Presente, que resume básicamente las líneas que he descrito y sobre las que queremos actuar.
Mi intención no es hablaros de la Constitución en sí, sino del papel que tuvieron las Juventudes Socialistas en el proceso constitucional.
Las Juventudes Socialistas de España, por entonces Juventudes Socialistas Unificadas, fueron desde el fin de la Segunda República una organización ilegal, y gran parte de sus miembros ejercieron desde el exilio. Fue en el año 1977, exactamente el 19 de Febrero cuando se legalizan las Juventudes tal y como ahora las conocemos. En septiembre de ese mismo año se celebra el XIII Congreso Federal, bajo el lema “Hagamos crecer el socialismo”. De él salió la Carta Constitucional de la Juventud, en la que se recogían las reivindicaciones juveniles que se pretendían incorporar a la Constitución de 1978. En ese mismo año, se disolvieron las Cortes Constituyentes convocando elecciones para el año siguiente.
Javier de Paz, miembro de esa Ejecutiva Federal recordaba hace unos años que las Juventudes habían sido, y son, la organización juvenil más importante de España (con más miembros que las Nuevas Generaciones del PP) y que los principios en que se basan son la ilusión sobre el futuro, la afirmación de la autonomía de Juventudes, la frescura en la interpretación del socialismo y la defensa de las libertades civiles y políticas.
En marzo de 1979 hubo elecciones generales y un mes después, en abril, las municipales lograron el triunfo socialista. Las Juventudes Socialistas, bajo el lema “Socialismo es libertad” se incorporaron a las concejalías de Juventud en muchos Ayuntamientos. Este fue un gran paso para Juventudes durante los primeros años de la transición.
En 1979 se celebra también el XIV Congreso Federal de Juventudes, en que salió reelegido como Secretario General Juan Antonio Barragán. Esta época, pese a suponer la resolución política de Juventudes como Organización, fue también una situación complicada, un proceso agotador que culminó en el XV Congreso Federal, en el año 1981.
Desde ese Congreso, las Juventudes Socialistas reivindicaron un nuevo espacio político, establecieron las bases de lo que había que empezar a construir, el marco de actuación de los jóvenes, en su lucha por la paz, la tolerancia y contra la violencia, luchar por la solidaridad, por cambiar la vida y un programa de movilización social que tenía como destinatarios a los que no se resignan.
Decía Santiago Carrillo en el Centenario de las Juventudes Socialistas de España que los jóvenes son un sector muy difícil, un sector que sólo busca su disfrute personal, y al que la política le queda muy lejos. Es por ello que decía Carrillo, quién fue también Secretario General de Juventudes, que hay que saber encontrar los caminos y aproximarse a esa juventud que no viene por iniciativa propia.
Resumen estas líneas de actuación unas palabras de Alfonso Guerra, en su intervención en el Congreso del Centenario, cuando decía que la juventud de hoy en día, es más difícil que la juventud de hace 30 o 70 años, que no se preocupa por entrar en el juego, y dejan hacer a quienes ven tan alejados de ellos mismos, creyendo que no pueden hacer nada desde su posición de jóvenes y ciudadanos.
Por ello, las Juventudes Socialistas tenemos que hacerles ver que esto no es así, que cada uno, desde nuestras pequeñas parcelas, podemos cambiar las cosas, podemos aportar nuestras ideas y nuestras ilusiones.
Por último una frase del Che, que viene al caso y resume el espíritu de esta campaña: El conocimiento nos hace responsables.
Sabemos que de entre los jóvenes de hoy en día, son pocos los que se preocupan por conocer la historia de nuestro país, por conocer nuestro pasado, los que se interesan por la política en términos generales o quieren oír hablar de partidos políticos y leyes. Es nuestra función, como miembros de las Juventudes concienciar a la gente, en nuestro ámbito de actuación, de que la política es algo de todos, de que la historia marca nuestro presente, y de que lo que hacemos ahora, determina nuestro futuro.
Los jóvenes no sólo somos el futuro de la sociedad, sino que somos ya el presente de la misma, y por tanto, debemos tomar posiciones en cuanto a la toma de decisiones. Porque cuando en 1978 se votó el referéndum por la Constitución española, quienes votaron a favor decidieron acerca de lo que hoy es el presente de España. Así como cuando hemos votado el estatuto andaluz, o la constitución europea, votábamos por el futuro, futuro que algún día, se convertirá en el presente de otras personas, y de nosotros mismos.
Es por ello, que queremos hacer ver a los más jóvenes de nuestro municipio que deben conocer el pasado, para comprender su presente y decidir sobre su futuro. Bajo el lema Conoce la Historia, entiende el Presente, que resume básicamente las líneas que he descrito y sobre las que queremos actuar.
Mi intención no es hablaros de la Constitución en sí, sino del papel que tuvieron las Juventudes Socialistas en el proceso constitucional.
Las Juventudes Socialistas de España, por entonces Juventudes Socialistas Unificadas, fueron desde el fin de la Segunda República una organización ilegal, y gran parte de sus miembros ejercieron desde el exilio. Fue en el año 1977, exactamente el 19 de Febrero cuando se legalizan las Juventudes tal y como ahora las conocemos. En septiembre de ese mismo año se celebra el XIII Congreso Federal, bajo el lema “Hagamos crecer el socialismo”. De él salió la Carta Constitucional de la Juventud, en la que se recogían las reivindicaciones juveniles que se pretendían incorporar a la Constitución de 1978. En ese mismo año, se disolvieron las Cortes Constituyentes convocando elecciones para el año siguiente.
Javier de Paz, miembro de esa Ejecutiva Federal recordaba hace unos años que las Juventudes habían sido, y son, la organización juvenil más importante de España (con más miembros que las Nuevas Generaciones del PP) y que los principios en que se basan son la ilusión sobre el futuro, la afirmación de la autonomía de Juventudes, la frescura en la interpretación del socialismo y la defensa de las libertades civiles y políticas.
En marzo de 1979 hubo elecciones generales y un mes después, en abril, las municipales lograron el triunfo socialista. Las Juventudes Socialistas, bajo el lema “Socialismo es libertad” se incorporaron a las concejalías de Juventud en muchos Ayuntamientos. Este fue un gran paso para Juventudes durante los primeros años de la transición.
En 1979 se celebra también el XIV Congreso Federal de Juventudes, en que salió reelegido como Secretario General Juan Antonio Barragán. Esta época, pese a suponer la resolución política de Juventudes como Organización, fue también una situación complicada, un proceso agotador que culminó en el XV Congreso Federal, en el año 1981.
Desde ese Congreso, las Juventudes Socialistas reivindicaron un nuevo espacio político, establecieron las bases de lo que había que empezar a construir, el marco de actuación de los jóvenes, en su lucha por la paz, la tolerancia y contra la violencia, luchar por la solidaridad, por cambiar la vida y un programa de movilización social que tenía como destinatarios a los que no se resignan.
Decía Santiago Carrillo en el Centenario de las Juventudes Socialistas de España que los jóvenes son un sector muy difícil, un sector que sólo busca su disfrute personal, y al que la política le queda muy lejos. Es por ello que decía Carrillo, quién fue también Secretario General de Juventudes, que hay que saber encontrar los caminos y aproximarse a esa juventud que no viene por iniciativa propia.
Resumen estas líneas de actuación unas palabras de Alfonso Guerra, en su intervención en el Congreso del Centenario, cuando decía que la juventud de hoy en día, es más difícil que la juventud de hace 30 o 70 años, que no se preocupa por entrar en el juego, y dejan hacer a quienes ven tan alejados de ellos mismos, creyendo que no pueden hacer nada desde su posición de jóvenes y ciudadanos.
Por ello, las Juventudes Socialistas tenemos que hacerles ver que esto no es así, que cada uno, desde nuestras pequeñas parcelas, podemos cambiar las cosas, podemos aportar nuestras ideas y nuestras ilusiones.
Por último una frase del Che, que viene al caso y resume el espíritu de esta campaña: El conocimiento nos hace responsables.
En la imágen: Samuel y yo en el IES Los Manantiales repartiendo los dípticos
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